Hace 53 años apareció por Piloña un empresario catalán interesado en fabricar caramelos. Era Enric Bernat, quien en 1958 inventó en Villamayor los Chupa Chups. Y aquel caramelo con palo, que llegó a ser el más famoso del mundo, también se convirtió en todo un símbolo y en el motor económico de la localidad piloñesa.
Pero ese vínculo podría perderse para siempre. El cierre de la fábrica de Villamayor se prevé para el próximo septiembre. Otra comarca Asturiana que se puede venir abajo con el despido de 300 trabajadores
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